Coincidiendo con el centenario de la Bauhaus, en septiembre de 2019 se inauguró el Bauhaus Museum Dessau. Su arquitectura refleja la idea fundacional del estilo Bauhaus, al mismo tiempo que constituye una proyección singular del mismo hacia el siglo XXI. Este edificio, situado en el centro de la ciudad, alberga una amplia exposición que relata la historia de la famosa escuela de la Bauhaus. Dicha institución fue pionera en promover la integración del arte y la artesanía, y es considerada el centro de formación más influyente del último siglo en los campos de la arquitectura, el arte y el diseño. Este nuevo museo permitirá al público acceder a la colección de la Fundación Bauhaus Dessau, que abarca un total de aproximadamente 49.000 piezas, lo que la convierte en la segunda mayor colección del mundo sobre la Bauhaus.

El nuevo edificio del museo ha sido diseñado por addenda architects. Este joven estudio de arquitectura barcelonés se impuso en un concurso público a 830 candidaturas de todo el mundo. El resultado es tan sencillo como sorprendente: el edificio de 12 metros de alto consta de una impresionante fachada de vidrio, donde el entorno se refleja o permite miradas, en función de la luz. En el interior de la envolvente acristalada se encuentra otro edificio, cuya planta superior está formada por un cubo cerrado de hormigón armado. Los arquitectos se han inspirado en la estructura de puentes, pues el cubo reposa en tan solo dos núcleos de escaleras, separados por una distancia de 50 metros. A través de las escaleras, los visitantes acceden a la exposición, que ocupa una superficie de 1.500 metros cuadrados. El espacio climatizado y protegido de la luz natural ofrece unas condiciones óptimas para conservar las piezas expuestas. La luminosa superficie de la planta baja alberga el vestíbulo, una cafetería y una tienda, además de un escenario abierto y las exposiciones temporales.

Al típico estilo Bauhaus, el lenguaje purista de formas encuentra su continuidad en los sanitarios: el inodoro de pared Darling New de Duravit presenta en su exterior una forma cerrada lisa y un borde confortable. En su interior, el inodoro destaca por el diseño moderno y sin canal de lavado, que permite un flujo perfecto. El resultado es una descarga dinámica y potente, que permite una limpieza óptima de la superficie interior de la taza. Ello garantiza un resultado higiénicamente impecable, incluso con pequeñas cantidades de agua.